La ciudad de Manizales, reconocida desde hace décadas como la capital taurina de Colombia, enfrenta una coyuntura histórica en la víspera de la Feria Taurina 2026. El comité organizador, junto a autoridades municipales y líderes del sector, ha reafirmado que el ciclo taurino anual se celebrará en enero próximo, en abierto desafío a la reciente legislación que prohíbe los espectáculos taurinos en Colombia a partir de 2026.
La postura manizaleña surge en respuesta a la promulgación, por parte del parlamento nacional, de un marco jurídico que ordena el cese total de corridas y festivales con animales, decisión respaldada por movimientos animalistas, pero rechazada por amplios sectores de la sociedad local y aficionados internacionales. El evento será presentado como “acto de rebeldía cultural”, congregando a las principales figuras del toreo de América y Europa, así como a ganaderos y público que considera la tauromaquia un patrimonio social y económico vital para la región.
Según declaraciones de los organizadores, la feria no solo incluye festejos taurinos, sino también actividades culturales, artísticas y académicas para exaltar el legado de la tauromaquia en la ciudad y promover el diálogo entre posiciones confrontadas. Se anticipa el arribo de turistas y estudiosos que buscarán vivir y documentar lo que podría ser la última feria bajo el formato tradicional, antes de la aplicación definitiva de la ley.
Autoridades destacan la importancia del respeto y la seguridad en esta edición especial, recordando que el encuentro se desarrollará bajo estrictas medidas de control, con protocolos para evitar incidentes y enfrentar posibles protestas. El sector empresarial local advierte que la prohibición afectará la economía de la región y la identidad cultural, e insiste en la necesidad de alternativas de desarrollo.
La feria de Manizales 2026 marca un punto de inflexión y pone a Colombia en el foco del debate internacional sobre la persistencia y transformación de tradiciones culturales frente al avance de nuevos paradigmas legales y sociales.
Sobre el contenido de este artículo de opinión, son exclusivamente del autor y no reflejan las de este medio de comunicación.
