El atacante francés arrastra un dedo fracturado en la mano izquierda, lesión sufrida el fin de semana anterior, y además presenta molestias musculares en la pierna, lo que ha condicionado su participación en los últimos entrenamientos y partidos. Aunque fue incluido en la convocatoria para el encuentro frente al Manchester City, Mbappé permaneció todo el partido en el banquillo, señal de que el cuerpo técnico no lo considera aún en plenitud para competir.
De acuerdo con versiones de la prensa deportiva española, en el club se considera que la lesión muscular no es de extrema gravedad, pero las sensaciones del jugador antes del último partido no fueron positivas. Por ello, el cuerpo técnico ha decidido no asumir riesgos innecesarios y supeditar su presencia ante el Alavés a la evolución en las próximas horas y a nuevas evaluaciones médicas.
La situación preocupa a un Real Madrid que ha mostrado una alta dependencia de Mbappé en ataque, dado que el francés participa en un porcentaje significativo de los goles del equipo en la temporada. En medio de una racha irregular de resultados, su posible ausencia obligaría a Xabi Alonso a reacomodar el frente ofensivo y a exigir mayor protagonismo de otros jugadores en la definición.
