Previo al inicio del segundo tiempo en el partido ante Huracán, diez futbolistas Boca Juniors ingresaron al campo de juego; posteriormente lo hizo el técnico Miguel Ángel Russo y, por último, fue el turno del uruguayo Miguel Merentiel. “¿Qué quieres hacer con Merentiel?”, le pregunta, confundido, un asistente al técnico, mientras Milton Giménez se alistaba para entrar. “Nada, afuera. ¡Haz el cambio!”, gritó un efusivo Russo. En el campo, Merentiel confundido miraba al banco de suplentes y Giménez no podía ocultar su incomodidad. Sorprendidos todos, el cuarto árbitro levantó el letrero electrónico para que se realice el cambio y salga el uruguayo, quien se fue corriendo al vestuario. Tres partidos han pasado desde entonces y en todo agosto, el peruano apenas ha sumado dos minutos de juego.
El encuentro acabó 1-0 a favor de Huracán y estampó la peor racha de partidos oficiales sin ganar (11) en la historia de Boca. Aunque el resultado quedó en segundo plano ante la secuencia insólita y caricaturesca que se vivió en el estadio de Parque Patricios. Una imagen que mostró a un Boca desorientado, a merced de los memes en redes sociales, pero que también describe la oscura actualidad de un club que se hizo gigante (tiene 323 mil socios, según informe de la AFA), entre otras cosas, por ganarle una Intercontinental a los poderosos Real Madrid (2000) y AC Milan (2003). Hoy, de ese inmenso equipo, no queda nada, solo escombros que no pudieron ni siquiera vencer al Auckland City, un equipo amateur de Nueva Zelanda, en el último Mundial de Clubes.
Y en medio de “uno de los peores Boca de la historia, como lo califica el periodista argentino Marcelo Gonzalez de “Cadena Xeneize”, está Luis Advíncula, el lateral derecho peruano, uno de los apuntados en esta crisis que parece no tener una pronta salida hacia la salvación.
“Quiso despejar con el taco en el área, la pelota le cayó a Cabral y su remate terminó dando en el travesaño. La pelota le dio en la espalda en un córner y casi es gol en contra”, analizó el diario Olé al peruano dándole tres puntos en la calificación ante Huracán, junto al uruguayo Edison Cavani y el técnico Russo. “La nada misma. Volvió a ser titular -vaya a saber uno por qué- y no gravitó en ningún aspecto del juego. En realidad todo lo que tocó, lo empeoró”, fue el comentario de TyC Sports, calificando su rendimiento con un solo punto.
“Este equipo está rompiendo todos los récords negativos posibles, van once partidos oficiales sin poder ganar. Fracasó en todas y cada una de las competencias a lo largo de los años, de los ciclos de los directores técnicos. Juega cada vez peor, no hay atisbo de mejora y sinceramente pone otra vez en riesgo la posibilidad de jugar una Copa Libertadores, que sería por tercer año consecutivo, lo cual hoy por hoy para Boca es gravísimo”, señala Marcelo Gonzalez.
Para Gustavo Pereyra, hombre de prensa de “Mundo Xeneize”, “a lo largo de los 120 años de historia, hubo muy buenos equipos , otros brillantes y equipos que han muy jugado mal, como pasó durante una crisis institucional en la década del 80, reflejo de los vaivenes económicos del país. En el año 84 el primer equipo hizo una gira europea en la que el Barcelona nos ganó por 9 a 1. O en el año 1949 cuando estuvimos a un partido de irnos al descenso. No podemos decir que este es el peor Boca de la historia, si que ha llegado a la peor racha sin triunfos y el equipo no da señales de recuperación”.
El presente de Boca Juniors es tan nefasto que el debate sobre si es el peor equipo que se vio en los 120 años de institucional está sobre la mesa. Y también está, por un costado, el nombre de Luis Advíncula, el peruano que supo ganarse el cariño del hincha Xeneize en la Copa Libertadores 2023, cuando llegaron a la final con él anotando cuatro goles en el torneo. Sin embargo, hoy, de ese Advíncula, no queda nada.
Boca Juniors
Y los once partidos que son la peor racha de su historia:
1-0 Huracán
2-1 Atlético Tucumán
1-1 Unión
0-0 Argentinos
1-1 Auckland
2-1 Bayern Múnich
2-2 Benfica
0-1 Independiente
0-0 Lanús
1-1 Tigre
2-1 River
Luis Advíncula y su futuro en Boca
“El hincha ya perdió la paciencia con él”, nos dice Marcelo Gonzalez. “Es un ciclo cumplido, no solo porque ya no rinde futbolísticamente, sino porque ya no muestra actitud ni garra, algo que antes tenía, incluso jugando mal”, añade.
Ante Huracán, Lucho perdió 19 veces la posesión del balón, no acertó ningún centro y ganó apenas dos duelos, según los datos de SofaScore. Su rendimiento fue uno de los más pobres entre un Boca desorientado.
Los números de Luis Advíncula ante Huracán.
Gustavo Pereyra recuerda que Advíncula tuvo todo para “ser un jugador importante” para Boca por su gran 2023; sin embargo, se fue desinflando desde aquella final de Libertadores perdida ante Fluminense. “El rendimiento no lo ha recuperado y hoy no brinda garantías en defensa ni en ataque, se lo nota fastidioso todo el partido”.
Pese al presente que tiene, el peruano cumpliría su contrato en el cuadro Xeneize. De acuerdo a la prensa argentina, la dirigencia, encabezada por Juan Román Riquelme, contempla hacer cumplir su contrato, que termina en diciembre del próximo año. En este mercado de pases tuvo algunos sondeos de clubes, pero nada contrato.