Hace poco más de un mes, Pumuckel, un caballo oriundo de Alemania, fue oficialmente reconocido por Guinness World Records como el caballo vivo más pequeño del mundo (macho), con apenas 52,6 centímetros a la cruz.
Lejos de ser un simple curioso récord, Pumuckel ha conquistado corazones gracias a su temperamento dócil y su rol como caballo de terapia. Su dueña, Carola Weidemann, relató que lo adoptó en octubre de 2020 tras una recomendación: tenía solo cinco meses, medía 47 cm y pesaba menos de 20 kilos.
Con el tiempo, este diminuto equino empezó a visitar residencias de ancianos, hospicios, escuelas y centros para personas con discapacidad.
Su carácter afectuoso, especialmente con niños, y su gusto por las caricias lo convirtieron en un verdadero puente de cariño y consuelo.
Participó en el programa televisivo alemán «Guinness World Records – Die Grosse Show der Weltrekorde», donde colaboró en la entrega de certificados, asombrando a muchos con su calma y carisma frente a las cámaras.
Pumuckel ha demostrado que su pequeño tamaño no le impide desenvolverse con naturalidad.
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