El Gobierno del Perú expresó su respaldo al nuevo presidente de Bolivia, Rodrigo Paz Pereira, quien asumió el mando tras las recientes elecciones generales en ese país. En un comunicado oficial, el primer ministro peruano, Ernesto Álvarez, afirmó que el cambio de gobierno “marca el fin de años de socialismo y oscurantismo” y abre una nueva etapa de cooperación regional.
Durante una conferencia de prensa ofrecida en Palacio de Gobierno, Álvarez señaló que el Ejecutivo peruano observa con optimismo el inicio del mandato de Paz, al considerar que su gestión “podría fortalecer la democracia y el desarrollo económico del altiplano, con un enfoque más abierto al comercio y la integración andina”.
El premier adelantó que en las próximas semanas se celebrará una cumbre bilateral entre Lima y La Paz para abordar temas de interés común, entre ellos la seguridad fronteriza, la conectividad vial y la promoción de inversiones en las zonas fronterizas de Puno y Desaguadero. Asimismo, se espera que ambos gobiernos avancen en acuerdos sobre energía, transporte y cooperación aduanera.
“Confiamos en que esta nueva etapa en Bolivia traiga estabilidad institucional y oportunidades de crecimiento compartido”, indicó Álvarez, quien destacó que el Perú mantiene una política exterior de respeto y diálogo permanente con sus países vecinos. Añadió que el restablecimiento de relaciones económicas con Bolivia podría favorecer la recuperación comercial del sur peruano.
Por su parte, la Cancillería del Perú emitió un pronunciamiento en el que felicitó al pueblo boliviano “por su vocación democrática y participación cívica” durante los comicios. En el documento se subraya que el Perú “reitera su compromiso con la integración sudamericana basada en la libertad, el respeto mutuo y el desarrollo sostenible”.
El nuevo presidente de Bolivia, Rodrigo Paz Pereira, asumió el cargo tras imponerse en una elección que puso fin al prolongado dominio político del Movimiento al Socialismo (MAS). Su victoria ha sido interpretada como un giro político hacia posiciones de centro, con una agenda centrada en la transparencia institucional y la inversión privada.
