El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, comunicó formalmente su intención de designar a Perú como “aliado principal no perteneciente a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN)”, en un esfuerzo por reforzar la cooperación en seguridad regional y la lucha contra las drogas ilícitas.
El anuncio fue remitido al Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense mediante un mensaje presidencial, conforme al procedimiento típico para este tipo de nominaciones, según informa Bloomberg.
Según el comunicado oficial, la designación reconoce prioridades de seguridad compartidas entre ambos países, que incluyen la estabilidad regional, el combate al narcotráfico y el fortalecimiento de los lazos económicos. El mensaje subraya que Estados Unidos busca ampliar su cooperación con gobiernos latinoamericanos que comparten estos objetivos estratégicos.
La medida, que todavía requiere la evaluación del Senado, llegaría en un contexto de intensificación de la campaña estadounidense contra el tráfico de drogas y los grupos narcoterroristas en la región, así como los recientes esfuerzos diplomáticos entre Washington y Lima para coordinar estrategias de seguridad.
ALIADO NO PERTENECIENTE A LA OTAN
El estatus de “aliado principal no perteneciente a la OTAN”, uso extendido en la política exterior de Estados Unidos desde la década de 1980, no implica automáticamente un tratado de defensa colectiva, pero sí confiere beneficios militares y de cooperación estratégica como el acceso preferente a equipos militares, ejercicios conjuntos y mayor participación en contratos de defensa.
En América Latina, Perú se uniría a otras naciones que han recibido esta designación, como Argentina, Colombia y Brasil, fortaleciendo así los vínculos estratégicos con Washington en materia de seguridad y defensa regional.
El anuncio se produce semanas después de que Trump otorgara el mismo estatus a Arabia Saudita, lo que demuestra la voluntad de la administración estadounidense de diversificar y profundizar sus alianzas globales más allá de los tradicionales socios europeos.
El gobierno peruano aún no ha emitido una declaración formal sobre la propuesta, pero fuentes diplomáticas han señalado que la designación, de aprobarse, podría impulsar la cooperación bilateral en defensa, inteligencia y programas conjuntos contra el crimen organizado y el narcotráfico transnacional.

