El mercado automotor peruano experimenta un cambio estructural con el aumento sostenido en la venta de vehículos eléctricos e híbridos, que registra un crecimiento de dos dígitos en lo que va del año, según reportes de la Superintendencia Nacional de los Registros Públicos (Sunarp) y la Asociación Automotriz del Perú (AAP).
Durante los primeros diez meses de 2025, se inscribieron más de 10.800 unidades nuevas, lo que representa un incremento superior al 18 % respecto al mismo periodo del año anterior. Este comportamiento positivo se explica, en parte, por los incentivos tributarios aplicados a modelos de baja emisión, la creciente conciencia ambiental entre los consumidores y las políticas públicas que fomentan la transición energética.
El presidente de la AAP, Eduardo Ojeda, destacó que Lima Metropolitana concentra más del 70 % de las ventas, aunque regiones como Arequipa, Cusco y La Libertad comienzan a mostrar un crecimiento acelerado. “El consumidor peruano está más informado y busca alternativas sostenibles; sin embargo, el precio sigue siendo la principal barrera”, precisó.
Los vehículos eléctricos e híbridos continúan siendo entre un 25 % y un 40 % más costosos que los de combustión convencional, debido a la dependencia de importaciones y al valor de las baterías. Aun así, la tendencia global hacia la descarbonización y el ahorro a largo plazo en consumo energético refuerzan su atractivo.
El Ministerio de Energía y Minas anunció que, para 2026, el país contará con al menos 250 estaciones de carga rápida en el territorio nacional, distribuidas principalmente en las principales rutas interregionales y capitales departamentales. Además, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) evalúa ampliar los beneficios arancelarios y fiscales para las empresas que importen vehículos eléctricos y autopartes.
Por su parte, el Ministerio del Ambiente (Minam) considera que esta transición es clave para cumplir con los compromisos internacionales de reducción de gases de efecto invernadero. Se estima que, con un parque automotor más limpio, el Perú podría reducir hasta un 15 % de sus emisiones urbanas hacia 2030.
No obstante, expertos advierten que la red de carga aún es insuficiente fuera de la capital y que falta una política integral de reciclaje de baterías. “El mercado está creciendo, pero necesita planificación para ser sostenible. No se trata solo de vender autos eléctricos, sino de construir un ecosistema que los sostenga”, señaló el analista energético Raúl Guevara.
La evolución del mercado eléctrico en el Perú refleja una tendencia irreversible en la región. Países como Chile, México y Colombia ya superan el 5 % de participación de vehículos eléctricos en sus ventas totales, mientras que Perú avanza paulatinamente hacia esa meta.
